Ahora Ana anotaba aquel acuerdo, Ariel amarillo aguantaba ansiosamente.
Adelante Anacleta, andaba anclada a ánimo anulado.
Anacleta:- ah! Apagárseme alma, ah! Adormecida anduve!
Anacleta:-Andes atravesaría ante analizarme. Angustiada admitiría.
Analia: aliméntese Anacleta ,¿Agua, Ades, Aquarius, algo?
Analia abordaba aprietos arbitrarios, admitiera así alto atasco amoroso al asentir aquel acuerdo anterior: alivianar alegremente al ámbito.
Aquel atardecer al avistar algunas aves aleteando alas al alto árbol arribaron abriendo atajos, allí acordaron amarse al amanecer.
Así andaban, Analia amaba a Ariel, Ariel alianzaba a Ana, a Anacleta ¿alguien aguantaba?
No hay comentarios:
Publicar un comentario